Partimos de la premisa fundamental de educar para que los y las estudiantes de cada nivel, puedan construir y consolidar las herramientas más apropiadas para desenvolverse y transformar el mundo del cual son parte. Que puedan hacerlo en un marco de respeto, confianza y libertad, será la garantía para que los aprendizajes sean profundos y significativos.

Consideramos que a través de la construcción de vínculos sanos y lazos afectivos sólidos entre los y las docentes, los y las estudiantes y toda la comunidad educativa, se construye el aprendizaje para toda la vida.

Proponemos una educación laica, pluralista, formativa y de calidad.

Desde esta mirada, el estudiante adquiere un singular protagonismo en el cual los y las docentes ofrecen los andamios que posibilitan y acompañan los diferentes caminos en cada trayectoria escolar.